Y al 15º día apareció la lluvía. En momentos, solo para ensuciar las gafas y en otros momentos sí me he visto obligado a estrenar el poncho. No ha ido del todo mal andar bajo la lluvía. Lo peor ha sido andar en algún tramo lleno de barro, ya que estaba muy resbaladizo.
Es increible el hecho de ir pasando por pueblos, a cuál más pequeño, y ver en prácticamente todos su albergue para peregrinos o cualquier tipo de alojamiento: hostal, hotel, casa rural.
Ahora mi pauta diaria se basa en 4 partes: antes del desayuno, del desayuno hasta una parada intermedia (parada par tomar una café con leche, una cocacola o cualquier cosa), de esta parada intermedia hasta la hora de comer, y finalmente, de la hora de comer hasta el final. El tramo más "largo", el que se me hace eterno, el que anhelo más, es llegar a la primera parada que es la del desayuno.
Hoy he hecho parada en Castrojériz, último pueblo burgalés, antes de saltar mañana a la provincia de Palencia.
Hoy 41 kms en 9h21m
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